Cuando oigo hablar de tensión social, de cómo la sociedad catalana está fracturada y azuzada por los medios y los políticos, me imagino una situación en la que encuentras incendiarias arengas por parte de unos y otros.
Yo llevo años buscando en medios muy muy muy escorados hacia el catalanismo más polarizado y abiertamente partidarios de la independencia de Cataluña la misma bilis, manipulación y tensión que veo en medios que publican a nivel estatal, incluso los más generalistas.
No he sido capaz de encontrar ni la mitad.
Y más, en medios más generalistas y en contenido creado por la ciudadanía (blogs, podcasts, radios y teles locales), donde lo que prima es la normalidad en el uso de expresiones como "aquí, a Espanta", "ha vingut a Espanya"... incluso, muy a menudo, en la propia TV3.
Lo siento: no compro el argumento del adoctrinamiento. Mito cazado.